Ciclo de vida del caracol

El ciclo de vida de los caracoles sigue patrones extraños comparados con el de otros animales terrestres. Los caracoles maduran a los 2 años de edad.

Reproducción de los caracoles

Los caracoles participan en diversos rituales de cortejo con el fin de atraer una pareja. Estos rituales duran un par de horas y hasta medio día. No hacen sonidos para llamarse los unos a los otros. No tienen capacidad de escuchar, por lo que emplean el tacto como una forma de cortejo. Se cubren al otro de sustancias que producen sus cuerpos antes de aparearse.

Esta sustancia les ayuda a participar en el apareamiento. Una vez finalizada la copula ambos caracoles siguen caminos separados. Al ser animales hermafroditas durante el apareamiento pueden concebir hasta 100 huevos cada uno. Estos huevos son pequeños y serán depositados en el suelo húmedo y a la sombra.

Muchos caracoles se aparean mensualmente siempre que sus condiciones de vida sean adecuadas para garantizar la subsistencia.

Nacimiento de las crías

Las crías tardan hasta cuatro semanas en nacer. A pesar de depositar tantos huevos, solo una pequeña parte llega a la adultez, muchos huevos son arrastrados por la lluvia y el agua de riego. Algunas crías son consumidas por los depredadores pues son muy lentas y abundantes.

Nada más salir de sus huevos, los caracoles deben obtener calcio. Nacen con una concha pero esta es muy frágil. El calcio les ayudara a endurecerlas para lograr la protección necesaria. Instintivamente consumen la cascara del huevo en el que vinieron. La concha del caracol continúa creciendo durante el transcurso de su vida. La concha con la que nacieron queda en el medio de la concha adulta.

En el interior de la concha de los caracoles les crecen anillos a medida que crecen. Así, científicos e investigadores son capaces de identificar qué edad tienen.

Si la concha se abre al resto del cuerpo continuara creciendo si tiene una pestaña no crecerá más.