¿Cómo nacen las lagartijas?

Las lagartijas son pequeños reptiles escamosos que pertenecen a la familia Lacertidae. Tienen tamaños que van desde los 5 cm a los 4 cm. En algunos casos las lagartijas pueden llegar a medir hasta más de 10 cm.

Las lagartijas son criaturas ovíparas, los machos se diferencian de las hembras por poseer una cabeza masiva, de forma triangular y las escamas más marcadas. Tienen una mayor longitud en las patas traseras.

En el caso de la lagartija ibérica, los machos presentan ocelos azules en los costados.

Reproducción de las lagartijas

Las lagartijas presentan reproducción ovípara y fecundación interna. Los huevos están recubiertos de albúmina y están protegidos por una cascara calcárea, esta es de color blanco y puede ser muy suave. Las lagartijas no presentan metamorfosis el desarrollo embrionario es directo.

La época de celo se da entre marzo y junio, en esta época las lagartijas son mucho más visibles. Los machos se vuelven más territoriales y agresivos. Pelean entre sí para mantener alejados a los competidores de las hembras.

Tras vencer, el macho protagoniza numerosas copulas con las hembras que se encuentran en su territorio. Esta copula puede llegar a durar más de una hora.

Durante los meses de marzo y junio las hembras pueden realizar varias puestas de entre 1 y 5 huevos. Estos se incuban con el calor durante 40 u 80 días dependiendo del calor ambiental y del nido.

Los huevos son generalmente colocados entre la tierra o en hendiduras en los muros en el caso de lagartijas urbanas.

Nacimiento de las lagartijas

Las crías nacen con un tamaño muy reducido. En esta etapa suelen desprenderse de sus colas para engañar a los posibles depredadores.

Tienen un tamaño de unos 3 cm y alcanzan la madurez sexual al año de vida, cuando miden cerca de 5 cm.